Terapia familiar
Las terapias familiares y el enfoque sistémico están indicados cuando el objetivo que nos proponemos es mejorar la capacidad de apoyo mutuo entre los miembros. Entendemos la familia como una totalidad, donde todos los miembros que la componen están interrelacionados y, por tanto, la conducta de cada uno de ellos, influye en los demás. No existen familias perfectas, todas las familias atraviesan cambios y conflictos.
En estas ocasiones en las que aparecen estas dificultades, a veces a la familia no sabe cómo solucionarlos por sus propios medios, el equilibrio de la familia se deteriora y los miembros que la componen sufren.
¿TE RESULTAN FAMILIARES ESTOS COMENTARIOS?
- «Hace tiempo que no podemos hacer planes en familia»
- «En casa ya no se puede decir nada»
- «Cada uno va a su rollo»
- «Cuando está en casa no sale de la habitación»
- «Todo le sienta mal»
- «No sé cómo decirle que su padre y yo vamos a separarnos»
- «Tengo una nueva pareja y mi hijo no lo acepta»
¿Qué podemos trabajar juntos?
Problemas de comunicación
Discusiones
Conflictos entre hermanos
Problemas en el establecimiento de roles en la familia
Ciclo vital familiar y adaptación en las diferentes etapas de transición
Cuidado de personas mayores
Cambios de domicilio importantes
Pérdida de empleo o problemas económicos significativos
Llegada de un nuevo miembro
Otras dificultades
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Terapia de pareja
Terapia de pareja
Los conflictos en el seno de la pareja son inevitables, incluso en esas parejas ‘perfectas’ que a nuestros ojos vemos tan unidas y en las que nada parece ir mal. El secreto para una relación de pareja satisfactoria es el modo en el que se gestionan esos inevitables desacuerdos. Para iniciar una psicoterapia de pareja, los dos miembros de esta deben tener un mismo objetivo a alcanzar, el cual es mejorar la dinámica de la relación.
Es como remar en una barca, hay que remar a la vez y en la misma dirección, si no el esfuerzo es en vano.
¿Por qué surgen los conflictos?
Cuando iniciamos una relación de pareja, estamos en la conocida fase de enamoramiento. Tiene un componente tan fuerte de pasión, afecto, ternura y sexo, que todo lo demás pasa a un segundo plano. Cuando el enamoramiento se pasa puede ser horrible para algunas parejas, ya que su relación se basaba en eso. Para otras parejas, en ese momento su relación evoluciona a algo más íntimo y profundo.
Uno de los mayores problemas que viven las parejas es la falta de comunicación entre sus miembros, en muchas ocasiones se necesita una ayuda externa para poder restablecer la comunicación deteriorada o perdida.
El psicólogo en las terapias de pareja es una figura neutra que analiza la problemática y los conflictos que ocurren y dañan a la pareja. Debemos generar un espacio seguro de respeto y de diálogo entre ambos, con el fin de permitir a la pareja aprender diferentes modos de relación y de comunicación, así como trabajar habilidades y recursos para solucionar los conflictos.
¿QUÉ PODEMOS TRABAJAR JUNTOS?
Problemas de comunicación
Celos e inseguridad
Pérdida de la pasión y/o la intimidad
Infidelidad
Gestión de los desacuerdos
Separación o divorcio
Problemas sexuales
Otras dificultades
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Terapia para niños y adolescentes
Terapia para niños y adolescentes
La psicoterapia infantil y con adolescentes es un campo de trabajo fascinante que tiene ciertas peculiaridades con respecto a la terapia psicológica para adultos.
La principal diferencia radica en que en la mayoría de los casos los niños y adolescentes no son conscientes del motivo por el cual sus padres les llevan terapia. Por ello el terapeuta trabajará con el menor la conciencia de su problema para que así se encuentre motivado al cambio. Además, otra de las características diferenciales de esta terapia es que en el tratamiento psicológico con menores, es sumamente primordial trabajar con los padres y madres y con las interacciones familiares que se establecen.
¿Cuáles son los motivos de consulta principales según el momento evolutivo?
Durante el “primer año” de vida, atendemos, principalmente, problemas relacionados con la alimentación y el ritmo de sueño-vigilia, así como dificultades con el cuidado físico y afectivo.
En la “etapa preescolar” (de uno a seis años), los problemas más comunes suelen ser los relacionados con: el control de esfínteres (enuresis y encopresis), los miedos y la ansiedad (terrores nocturnos, ansiedad de separación, enfrentarse a situaciones o personas desconocidas, etc.), los problemas de conducta (oposicionismo, rabietas), etc.
En la “etapa escolar” (de siete a once años) pueden perdurar trastornos de conducta y de atención, además de problemas de adaptación al medio escolar y al grupo de iguales así como problemas relacionados con la ansiedad y el estado de ánimo o los trastornos por déficit de atención con o sin hiperactividad.
En la “preadolescencia” (de 12 a 14 años), problemas con la imagen y la adaptación social, rendimiento académico, problemas de la conducta alimentaria, conductas antisociales, etc.
La “adolescencia“, está claro es que se trata de una época difícil, tanto para los propios adolescentes, como para los padres. Son las relaciones familiares las que más sufren en esta época. La terapia suele funcionar muy bien con los adolescentes, ya que se siente por fin escuchados y, si se les sabe tratar, colaboran abiertamente.
¿Qué podemos trabajar juntos?
Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH)
Trastornos de conducta
Adicciones sin sustancia (internet, móviles, etc.)
Baja autoestima
Miedos y Fobia
Ansiedad
Estado de ánimo
Acoso Escolar
Fracaso Escolar
Habilidades Sociales
Enuresis
Otros trastornos
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Terapia para adultos
Terapia para adultos
En muchos portales de internet probablemente hayas podido consultar y leer sobre cuándo una persona debe acudir a un psicólogo. Has dado el primer paso, pero antes tenemos que plantearnos si realmente este es el momento en el que iniciar una psicoterapia, ya que no siempre nos encontramos preparados para ello. Si la respuesta sigue siendo ¡sí, quiero comenzar! te damos nuestra enhorabuena por elegir el espacio de aigolocis para ello.
Pero… ¿qué me está ocurriendo?
En muchas ocasiones los adultos encontramos que nuestro equilibrio emocional se resiente y que nuestra calidad de vida se va deteriorando por situaciones difíciles que nos suceden. A veces, intentamos salir adelante por nuestros medios pudiendo sentirnos frustrados al no conseguirlo. En esos momentos, es cuando se puede acudir a un psicólogo para que pueda acompañarnos a reestablecer nuestro bienestar y el equilibrio emocional perdido
De este modo, la labor del psicólogo en la terapia será guiar y acompañar a la persona, para adoptar nuevos modos de pensar y afrontar la realidad que le permita el alivio y superación de sus dificultades.
Nuestras psicólogas son expertas en evaluar, comprender y trabajar la conducta y los procesos mentales. Mediante una terapia psicológica adecuada se superan los trastornos emocionales y también dificultades en la relación con los demás, como la timidez, déficit de habilidades sociales, problemas de pareja, etc.
Muchas personas sin problemas graves buscan también ayuda profesional para entender mejor sus comportamientos y sentimientos, para fomentar su desarrollo personal, previniendo así también la aparición de trastornos psicológicos, mejorando su bienestar y su estado de salud y fortaleciendo las partes sanas y saludables que posee la persona.
También debemos tener en cuenta que la psicoterapia no es un proceso fácil, debemos contar con la existencia de altibajos a lo largo de la misma. El resultado dependerá tanto de las competencias y destrezas del terapeuta como del grado de implicación y de motivación al cambio que tenga el paciente, siendo necesario que este adopte un papel muy activo para conseguir los objetivos que conjuntamente propongamos.
¿Qué podemos trabajar juntos?
- Depresión y estado de ánimo
- Ansiedad
- Agorafobia y Trastorno de Pánico
- Duelo y pérdida
- Timidez, asertividad, déficit habilidades sociales, agresividad.
- Dependencia emocional y miedo al abandono.
- Trastornos del sueño.
- Dificultades laborales.
- Adicciones.
- Otros trastornos.